La candidata a Reina de Ibarra, Cinthia Robalino; el Prefecto de Imbabura, Pablo Jurado; y, la Viceprefecta, María Gabriela Jaramillo, en el acto de homenaje.
En acto especial, autoridades y trabajadores del área administrativa y de los diferentes frentes operativos compartieron momentos de confraternidad, la noche del viernes, 12 de septiembre, en un acto en honor a la candidata al reinado de la capital de Imbabura que auspicia la Prefectura provincial.
IBARRA.- Cinthia Robalino, bella señorita ibarreña de 23 años de edad, cuyo mayor deseo es servir a la ciudad que la vio nacer, recibió un homenaje de la Prefectura de Imbabura, entidad que auspicia su candidatura a Reina de Ibarra.
“Hemos considerado importante hacer presencia institucional en las fiestas de los 408 años de fundación de la capital imbabureña, respaldando a una joven mujer que por su cualidades humanas y valores merece llevar la corona de la ciudad”, dijo el Prefecto Pablo Jurado, en el acto de homenaje.
Sostuvo que la Prefectura tiene abiertas las puertas para trabajar en forma mancomunada con quien resulte electa como la nueva soberana de Ibarra, tomando en cuenta que se trata de una digna representación de la mujer, cuyo principal objetivo es entregar todo su esfuerzo por ver mejor a su tierra y a sus habitantes.
La Viceprefecta María Gabriela Jaramillo destacó que, a parte de la belleza física de la candidata, lo más trascendente es la personalidad que irradia, dejando notar su inteligencia, valores morales y preparación para trabajar en bien de sus coterráneos.
Cinthia Robalino agradeció el auspicio y comprometió una labor dirigida a hacer posible el l bienestar de la población ibarreña, especialmente de los sectores que requieren atención prioritaria.
La espiritual dama es egresada de la carrera de ingeniería en alimentos de la Universidad Técnica Equinoccial. Es hija de Luis Robalino y Guadalupe Méndez. Tiene dos hermanos.
De ser electa reina aspira cumplir tareas en beneficio de las madres adolescentes, organizando talleres de capacitación productivos. Buscará convertir a los mercados en sitios gastronómicos de gran connotación para atraer la presencia de turistas nacionales y extranjeros y así dinamizar el aparato económico.
Su mensaje es “soy ibarreña de corazón, amo a mi ciudad y jamás la cambiaría por otra”.
