El prefecto Pablo Jurado inaugura las cunetas y pasos de agua construidos en la comunidad Sachapamba de Cahuasquí.
La Prefectura construyó cunetas y pasos de agua en esta localidad en donde residen 120 familias, dedicadas principalmente a la actividad agrícola. En esta labor se invirtió 86.962 dólares, de los cuales, 5.000 fue el aporte del Gobierno Parroquial.
Los caminos de la comunidad Sachapamba, perteneciente a la parroquia Cahuasquí del cantón Urcuquí, lucían destruidos tiempo atrás. La lluvia, muy común en este sector rural, acumulaba agua y abría zanjas por donde difícilmente se podía transitar.
El pasado 25 de junio, la Prefectura puso fin a este problema al inaugurar las cunetas y pasos de agua, construido, a través del Presupuesto Participativo. El organismo destinó 81.962 dólares para este proyecto y el Gobierno Parroquial puso 5.000 de sus recursos.
Al final se construyó 1.400 metros de longitud de cunetas con un ancho de 80 centímetros y un canal de agua de 220 metros de longitud. Con esta acción, las vías ya no son afectadas. La infraestructura de cemento armado permite que el agua fluya y sea aprovechada regando las tierras.
La intervención institucional en este territorio trajo alegría a las 120 familias aquí radicadas. En su representación, Gallardo Vega, presidente del Gobierno Parroquial, dijo estar agradecido con la institución provincial que supo poner atención a las necesidades de los comuneros y dio marcha a la ejecución de esta obra.
Vega sostuvo que en Sachapamba era importante realizar este trabajo, tomando en cuenta que se requiere caminos adecuados para que puedan ingresar vehículos pesados y así poder trasladar hacia los mercados cercanos la variada producción agrícola.
En esta comunidad, las tierras son aptas para el cultivo de papas, habas, fréjol, arveja, tomate de árbol, cebada, trigo, maíz, granadilla, entre otros alimentos. La principal fuente de desarrollo económico de las familias proviene precisamente de lo que madura en los terrenos, luego de largas faenas.
Al inaugurar la obra, el prefecto de Imbabura, Pablo Jurado, se mostró complacido. Allí dijo que como autoridad provincial ha tomado en cuenta llevar a cabo este tipo de tareas que permiten una mejor calidad de vida para quienes habitan en los sectores rurales.
La gente del campo necesita que atendamos sus necesidades. “Por eso hemos multiplicado nuestra capacidad de acción, conformando alianzas estratégicas con otros organismos públicos para hacer realidad el progreso”.
Jurado recorrió la comunidad. Observó la situación de los caminos. Esto le permitió tener una idea clara de lo que se requiere hacer en este sector en materia de vialidad. El objetivo siguiente, según sus palabras, será el de definir los mecanismos necesarios para complementar la intervención.