Autoridades de la Prefectura y de los gobiernos parroquiales se sientan a conversar sobre la importancia de trabajar en conjunto para poner al servicio de las comunidades un paso adecuado. El propósito es incentivar la actividad turística y productiva.
IBARRA.- En las parroquias San Pablo de Lago y La Esperanza, el prefecto de Imbabura, Pablo Jurado, realizó un recorrido, acompañado de las autoridades locales en funciones y electas. El objetivo fue conversar y establecer acuerdos para emprender el proyecto de rehabilitación de la vía que conecta a los dos poblados que pertenecen a los cantones Otavalo e Ibarra.
La obra de vialidad es de gran importancia para todo este territorio que se caracteriza por contar con paisajes hermosos y espacios agrícolas de gran producción. Por ese motivo el presidente del Gobierno Parroquial de San Pablo, Amadeo Casco, y su similar electa de la esperanza, Anita Carrillo, coincidieron en solicitar el apoyo del organismo provincial.
Las inquietudes planteadas al Prefecto giraron en torno al aprovechamiento que traerá consigo la tarea de rehabilitación. El ecoturismo y la producción, sin duda, según los representantes de las comunidades, se verían favorecidas al contar con un medio adecuado de movilización. Los turistas no tendrían dificultades para arribar a la zona y los propietarios de las tierras estarían en capacidad de sacar sus cosechas a los mercados sin mayores problemas.
Durante la conversación el titular de la Prefectura, Pablo Jurado, se mostró abierto a emprender esta acción, anotando, sin embargo, que es necesario sumar esfuerzos con los municipios, por ello afirmó que se adelantarán gestiones con las nuevas autoridades para analizar las posibilidades de inversión económica en el proyecto que constituye el anillo vial rural.
Ana Carrillo, presidenta electa de la Esperanza, mencionó que su trabajo irá enfocado a la minga no solo de voluntades, sino de recursos para la generación de espacios productivos en beneficio de los ciudadanos. “Cuenten con nuestro apoyo, esperando que la obra se convierta en realidad”.
En la misma forma se pronunció el representante de la parroquia San Pablo, para quien la modalidad del Presupuesto Participativo que puso en marcha la actual administración de la Prefectura, es una oportunidad que tiene la población de conseguir que los proyectos prioritarios se pueden ejecutar compartiendo responsabilidades.